¿Has oído de Samgar? Es uno de los jueces de Israel y se habla de él en el Antiguo Testamento. Su nombre no es Israelita y significa extranjero. Se dice muy poco de él, la biblia resume su vida y obra en 40 palabras.

Pero lo que dice de él es increíble, dice que mató a 600 Filisteos con una aguijada de bueyes.

¿Qué era una aguijada de bueyes? era un palo con una punta de metal que contaba con un pequeño garfio a un lado, una aguijada no es un arma, entonces tenemos a un Israelita que no es Israelita, con un arma que no es arma.

¿Por qué una aguijada? En un escrito de muchos años después encontramos la explicación:

1 Samuel 13:19-22

19 Y en toda la tierra de Israel no se hallaba herrero; porque los filisteos habían dicho: Para que los hebreos no hagan espada o lanza.

20 Por lo cual todos los de Israel tenían que descender a los filisteos para afilar cada uno la reja de su arado, su azadón, su hacha o su hoz.

21 Y el precio era un pim por las rejas de arado y por los azadones, y la tercera parte de un siclo por afilar las hachas y por componer las aguijadas.

22 Así aconteció que en el día de la batalla no se halló espada ni lanza en mano de ninguno del pueblo que estaba con Saúl y con Jonatán, excepto Saúl y Jonatán su hijo, que las tenían.

Los Filisteos habían desarmado totalmente a Israel y habían matado a los herreros, nadie sino el rey y su hijo tenían espadas.

Quitaban escudos, espadas, y lanzas, pero no las hachas, los azadones y las aguijadas porque eran necesarias para las labores agrícolas y ganaderas diarias de sembrar y cuidar el ganado.

Los filisteos les quitaron los recursos para tenerlos en desventaja, pero cuando luchas por Dios, no es tu nacionalidad, ni tus recursos, ni tus habilidades sino es Él quién gana las batallas.

No pienses en función de que Dios está ahí para luchar tus batallas solamente, también piensa que Dios quiere que nosotros peleemos las batallas de Él.

No pienses que Dios puede ganar sus batallas a través de otro, piensa que las puede ganar a través de ti.

Todo lo que necesitas es su Espíritu y sólo lo puedes tener recibiendo a Jesucristo como Señor y Salvador.

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